Jean Luc es el
director de la alianza francesa de La Tahona, llegó en los años 80 a Venezuela,
y seducido por el clima, el ambiente tropical, y la belleza del país que estaba
conociendo (y de sus mujeres probablemente), decidió no ponerle fecha inmediata
a su regreso a Francia y dedicarse a enseñar su idioma natal por un tiempo, ya
lleva más de 25 años.
Un día de esos
en que las protestas originadas por #LaSalida
se transformaron en continuas trancas del este de Caracas, decidí tercamente ir
a las clases de francés con las esperanza de que no hubiesen sido canceladas.
Con lo único que me conseguí fue con la secretaria advirtiéndome que las clases
fueron suspendidas hasta nuevo aviso, y con Jean Luc que me invitó a pasar a su
oficina.
El problema de Venezuela es que la gente se va
coño, me empezó a decir con un castellano perfecto con algunos rastros de francés
en la pronunciación, Europa quedó devastada después de la segunda guerra mundial,
y en Francia la gente no se fue, a diferencia de otros países europeos los
franceses se quedaron con la esperanza de reconstruir un país que estaba destruido. Aquí
nos falta es organizarnos mucho más, muy bien que protestemos por los problemas
que nos afectan, pero como vamos a sabotear nosotros mismos nuestros trabajos trancándonos
las vías.
Luego me empezó
a explicar, o más bien a justificar, del porque no se había regresado a Francia a estas
alturas. A mí todavía me gusta este país, me respondía, estuve en Paris de vacaciones
hace poco pero todavía no me entusiasma la idea de abandonar Venezuela, el clima
la gente y muchas otras cosas más hacen que no me quiera regresar, así me
sueldo desaparezca cuando lo convierto en Euros. Me advertía que solo se regresaría
si en Venezuela estalla una guerra civil.